No es muy complicado para una cocina dar una visión moderna, el blanco y el negro son nuestros mejores amigos para esto.
Esta pareja recién casada acababa de comprar la casa y quería aprovechar al máximo este espacio con estos colores tan característicos.
¿Qué más querían? Que fuera una cocina bien equipada que sirviese para todo tipo de comidas, especialmente desayunos y platos rápidos.
Para esta reforma hemos sacado nuestras dotes más vanguardistas y hemos conseguido crear un espacio súper práctico, moderno y cómodo.
Ahora toca contarte los secretos para hacer de este lugar una pieza clave del hogar.
Creando una nueva imagen
Sin colores estridentes ni distribuciones confusas que cansen a la vista, juntamos los tonos claros y oscuros con el tono de madera, generando así una visual moderna a la vez que acogedora.
Y es que para una cocina principalmente blanca, nada le viene mejor que una encimera negra. Por lo que usamos el modelo porcelánico Techlam de Levantina, en elegante modelo Concerto, que rompe la uniformidad y perfila la sala.
El toque de madera, de un color suave que consigue jugar a la perfección con el blanco, destila calidez y familiaridad, además se complementa muy bien con los pequeños accesorios.
Con la gran fuente de luz natural brindada por el gran ventanal que nos encontramos, la cocina, que no era de gran tamaño, puede parecer más grande gracias al efecto que hace una buena iluminación sobre los fondos blancos.
Haciendo de la cocina un juego de niños
Para dar pie a la comodidad y no inundar la pequeña cocina colocamos el mobiliario en ambos lados de la habitación. Utilizamos para los armarios puertas modelo Mediterráneo con laminado blanco brillo y tiradores invisibles, súper cómodos y seguros.
La mesa con forma de L es perfecta tanto para comidas rápidas como para colocar pequeños electrodomésticos. La melamina en Roble Arena combina perfectamente con el resto de la cocina y con su resistencia conseguimos muchos años de uso diario.
Encima de la mesita podemos ver el mueble vitrina, con puertas modelo Khalo, color aluminio negro y exterior roble arena, en una disposición perfecta para guardar todo tipo de vajilla y ya puestos, exponerla a los afortunados invitados.
Una disposición compacta y bonita
Como venimos haciendo en la gran mayoría de reformas, integramos los electrodomésticos al resto del mobiliario, ahorrando espacio y otorgando practicabilidad.
El horno y el microondas se encuentran uno encima del otro, ambos al lado de la mesa, agilizando mucho el cocinado.
El gran frigorífico, con congelador incluido, posee cuatro compartimentos, consiguiendo un almacenamiento y orden masivo, que con sus dos contiguos compañeros facilitan el comer bien y rápido.
Pasando al otro lado de la sala, centrándonos en la negra encimera, instalamos una vitrocerámica y un fregadero. La primera se encuentra enfrente de la nevera y tiene espacio en la encimera para todo tipo de maniobras.
El fregadero viene de la mano de Veravent, modelo Greenwich y un acabado Cristadur de color carbón, mezclándose a la perfección con el concerto de Techlam.
El grifo también es de Veravent y escogimos el modelo Gessi Inedito, color negro mate, cuya función extraíble mejora la limpieza y es pura practicidad.
Comodidad en la novedad
Con esta reforma hemos conseguido crear un espacio vanguardista jugando con la diferencia entre tonos y distribuyendo el espacio de manera que una pequeña habitación hasta parezca más grande.
Una cocina moderna blanca con encimera negra, práctica y cómoda, que hace de una nueva casa un lugar al que llamar hogar.
Nunca es tarde para darle un poco de magia a tu casa, si estas buscando renovar tu cocina, podrás dar el primer paso a aquí.
O si quieres visitarnos y tener un asesoramiento más humano, aquí puedes comprobar si nos encontramos cerca de ti.